Hacer Pilates no es sencillo aunque tampoco es lo más complicado del mundo. La razón por la cual hay que ser cuidadosos al hacer los ejercicios es que una mal posición o movimiento puede costarte una lesión.
Para evitar esto, ten en cuenta estos consejos basados en los principios fundamentales de esta disciplina:
Estabiliza tu postura: lo primero es encontrar la posición correcta para realizar el ejercicio o movimiento trabajando tus puntos fuertes (trasverso, suelo pélvico, paravertebrales) y no tu espalda y articulaciones.
Respira: la respiración debe acompañar a cada ejercicio. Suelta el aire cuando tengas que hacer el máximo esfuerzo.
Activa tu centro energético: estómago hacia dentro y suelo pélvico hacia arriba.
Muévete con fluidez: muévete con suavidad y continuidad sin necesidad de hacer tirones.
Y por último, ten control y precisión: el ángulo incorrecto puede convertir el Pilates en una actividad perjudicial. Es por esto que nada como la guía de un instructor de Pilates, sobre todo si eres principiante, para aprender la técnica adecuada.
Para evitar esto, ten en cuenta estos consejos basados en los principios fundamentales de esta disciplina:
Estabiliza tu postura: lo primero es encontrar la posición correcta para realizar el ejercicio o movimiento trabajando tus puntos fuertes (trasverso, suelo pélvico, paravertebrales) y no tu espalda y articulaciones.
Respira: la respiración debe acompañar a cada ejercicio. Suelta el aire cuando tengas que hacer el máximo esfuerzo.
Activa tu centro energético: estómago hacia dentro y suelo pélvico hacia arriba.
Muévete con fluidez: muévete con suavidad y continuidad sin necesidad de hacer tirones.
Y por último, ten control y precisión: el ángulo incorrecto puede convertir el Pilates en una actividad perjudicial. Es por esto que nada como la guía de un instructor de Pilates, sobre todo si eres principiante, para aprender la técnica adecuada.
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