Supuesta ejecución joven por policía estremece población Santiaguera

SANTIAGO DE LOS 30 CABALLEROS. – Otra vez el sobresalto estremece a la población Santiaguera, particularmente a los residentes de la parte baja de esta ciudad, con la supuesta ejecución que fue víctima el joven José Adriano Gómez Taveras, en horas de la madrugada del domingo pasado, en el barrio Baracoa, a manos del identificado agente policial Eddy José Toribio Ogando.
En una relación de los acontecimientos que se presentaron previos al funesto desenlace, la Dirección Cibao Central de la Policía Nacional, por intermedio de su vocero el coronel Jesús Cordero Paredes, dan cuenta que el agente envuelto en el incidente, iba a ser agredido por el muerto, y que se vio precisado a repeler la acción.
Ogando pertenece a la Policía Preventiva y de acuerdo a la versión de la uniformada, llegó al lugar acompañado de otros agentes luego de recibirse una denuncia de que varias personas pretendían cometer un robo por los alrededores de la iglesia San José de la Montaña del barrio Baracoa, ubicada a poca distancia de donde se registró el hecho de sangre, que ha alborotado a sus moradores, porque al decir de los mismos, el fallecido mostraba una conducta ejemplar.
Apegado siempre al informe policial, fue en esas circunstancias que la patrulla localizó a Gómez Taveras, de 19 años, quien al ordenársele detenerse “sorpresivamente le fue encima al sargento, quien se vio en la necesidad de dispararle mientras estaban en la calle 19 de Marzo, en Baracoa”.
Pero con lo que cuenta la – PN – no están de acuerdo familiares, como alegados testigos de la tragedia, que reiteraron que el joven fue ejecutado por el sargento Toribio Ogando, al dispararle a quemarropa en la parte superior de la cabeza, luego de obligarlo a arrodillarse a sus pies.
La tragedia a provocado tanta consternación entre los residentes en donde vivía el joven, que cuando trasladaban sus restos al cementerio del Ingenio Arriba, la caja que los llevaba, fue detenida en el Palacio de Justicia del ensanche Román, vociferando justica.
Autor: Hilarión Isalguéz