NUEVA YORK._ El taxista dominicano Jesús Díaz de los Santos de 34 años de edad, acusado falsamente por un policía anti narcóticos de haberle vendido al agente 100 pastillas de la peligrosa Extasis, tendrá que ser recompensado por el municipio y el Departamento de Policía con US $1.5 millones de dólares por haber estado 9 meses en la cárcel siendo inocente. El monto que se le pagará al chofer es parte de un arreglo al que llegaron él, su abogado y la oficina legal de la ciudad, para evitar llevar a juicio a la uniformada, lo que hubiera representado una cifra mucho mayor a través de un jurado.
El acuerdo, se rubricó en la Corte Suprema de El Bronx. El taxista fue arrestado falsamente por el oficial en el año 2002 y el encubierto lo acusó de haberle “vendido” la droga, pero el cargo fue totalmente inventado.
Roy Hiller, abogado del dominicano pudo probar que el policía, incluso, no estaba en servicio el día que se inventó el arresto del chofer criollo. También demostró que su cliente no correspondía a una descripción que ofreció el agente sobre el supuesto sospechoso.
Los cargos fueron desestimados en el 2004, pero no fue sino hasta el pasado viernes que los abogados municipales decidieron que se firmara el arreglo.
Gia DiCola, jefe de la Oficina de Asuntos Legales de la ciudad declinó hacer comentarios respecto al caso. “Este es el final de una parte muy fea de mi vida”, dijo el taxista. “Hubo un error, pero gracias a Dios tuvo un final”, agregó.
El chofer es casado y tiene dos hijos. “Ese policía es un mal oficial, ni siquiera trabajó el día que se inventó la falsa historia contra mi cliente”, explicó el abogado del taxista criollo.
El arresto a Díaz de los Santos se llevó a cabo el 15 de abril del 2002 y el policía lo identificó como “JD Trenzas” debido a lo largo de su pelo trenzado. Dos semanas después, el agente le entregó una identificación falsa a su supervisor.
De los Santos, fue detenido en base a los datos proporcionados por el encubierto. Su abogado dijo que el oficial no ha sido disciplinado y sigue trabajando en la misma posición que hace 7 años. El taxista, quien recordó que en el momento de ser arrestado, caminaba por la avenida Broadway entre las calles 141 y 142 del Alto Manhattan, pidió no ser fotografiado ni filmado en video para proteger su identidad.
Autor: Miguel Cruz Tejada
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