Alex Matos tuvo su primer contacto con la música a los cinco
años de edad. Aunque apenas era un infante, el salsero ya tenía un
pequeño grupo en el ensanche Espaillat, donde nació un 12 de febrero.
Pasó el tiempo y las obligaciones, el tener que trabajar para vivir y sus estudios universitarios de Ingeniería en Sistemas -profesión de la que se graduó en APEC e incluso llegó a ejercer-obligaron a Alex a mantenerse alejado de su verdadera vocación.
Con el pasar de los años, el joven artista dirigió el West Side Bar junto a uno de sus hermanos. Ya era 2003. Y quiso el sino que en este establecimiento volviera a su pasión.
“Todo el asunto empezó en el karaoke. Al cantar en ese sitio sentí el renacer de mi vocación y empecé a prepararme para ser artista. En el karaoke reencontré mi camino”, dijo con una carcajada de satisfacción el intérprete del tema “Una noche no es bastante”.
“Yo me había olvidado de lo que era mi vocación, pero llegó un momento en el que empecé a ver lo que era cantar otra vez. Noté que causé sensación en la gente y me dije: ‘Oh, pero yo tengo el toque todavía’. Entonces me decidí a seguir mis sueños”, recordó emocionado.
A partir de ahí asumió su carrera con más profesionalidad. Tomó clases de canto con la profesora Marianela Sánchez.
En el 2006 empezó su proyecto personal junto a su hermano Wascar e hizo una primera producción: “Alex Matos, ponte en salsa”, que ahora considera que fue un error, pues hicieron una inversión millonaria sin tener asesoría.
Después de este desliz, la historia ha sido otra. Por eso ahora puede recoger los frutos. Se mostró agradecido con su manager Juan Carlos Payán, todo su equipo y su madre, quien ha sido un soporte.
Muy bendecido. A Alex le llevó cuatro años consolidar su proyecto. Su esfuerzo quedó coronado cuando este año obtuvo el Casandra como Salsero del Año.
“Lo primero que te puedo decir es que a raíz de este premio han llovido las contrataciones. Estamos quizás más activos de lo normal. En un país como éste, donde se consume tanta bachata y merengue, difícilmente un salsero tenga tanto movimiento. Estamos muy solicitados en el país e internacionalmente”.
Haber ganado el Casandra ha sido una bendición para el salsero, quien entiende que esto lo impulsa y lo compromete a “demostrar que merecemos ese premio y los demás que puedan llegar”.
Segundo álbum. El poco tiempo que tiene libre, el cantante lo invierte en la grabación de su nueva producción “La salsa vive”, cuyo nombre surgió a raíz de una campaña que inició Chino Méndez para que este género fuera incluido otra vez en el Casandra.
El disco, que saldrá a mediados de año, incluye “Si entendieras”, “Una noche no es bastante”, “El cariño es como una flor”. Además Alex ha hecho su propio aporte con los temas “Qué pena me da”, “Amor por internet” a dúo con Vakeró, y “Debo decirte que te amo”. Ha recibido la colaboración de Roy Tabaré y Willy García, de Son de Cali.
Alex aceptó el reto y confía en el éxito de su disco... es un hombre de fe.
Zoom
La gira
Estados Unidos
El martes pasado, Alex Matos inició una gira que lo llevará durante un mes por varias ciudades de Estados Unidos: Filadelfia, Washington, Los Ángeles, Pensilvania y Houston son algunos de los lugares a los que llevará su salsa. “Vamos en camino a la internacionalización porque uno logra esta meta cuando la mayor cantidad de personas que te visita no es de tu país”, señaló el joven.
Pasó el tiempo y las obligaciones, el tener que trabajar para vivir y sus estudios universitarios de Ingeniería en Sistemas -profesión de la que se graduó en APEC e incluso llegó a ejercer-obligaron a Alex a mantenerse alejado de su verdadera vocación.
Con el pasar de los años, el joven artista dirigió el West Side Bar junto a uno de sus hermanos. Ya era 2003. Y quiso el sino que en este establecimiento volviera a su pasión.
“Todo el asunto empezó en el karaoke. Al cantar en ese sitio sentí el renacer de mi vocación y empecé a prepararme para ser artista. En el karaoke reencontré mi camino”, dijo con una carcajada de satisfacción el intérprete del tema “Una noche no es bastante”.
“Yo me había olvidado de lo que era mi vocación, pero llegó un momento en el que empecé a ver lo que era cantar otra vez. Noté que causé sensación en la gente y me dije: ‘Oh, pero yo tengo el toque todavía’. Entonces me decidí a seguir mis sueños”, recordó emocionado.
A partir de ahí asumió su carrera con más profesionalidad. Tomó clases de canto con la profesora Marianela Sánchez.
En el 2006 empezó su proyecto personal junto a su hermano Wascar e hizo una primera producción: “Alex Matos, ponte en salsa”, que ahora considera que fue un error, pues hicieron una inversión millonaria sin tener asesoría.
Después de este desliz, la historia ha sido otra. Por eso ahora puede recoger los frutos. Se mostró agradecido con su manager Juan Carlos Payán, todo su equipo y su madre, quien ha sido un soporte.
Muy bendecido. A Alex le llevó cuatro años consolidar su proyecto. Su esfuerzo quedó coronado cuando este año obtuvo el Casandra como Salsero del Año.
“Lo primero que te puedo decir es que a raíz de este premio han llovido las contrataciones. Estamos quizás más activos de lo normal. En un país como éste, donde se consume tanta bachata y merengue, difícilmente un salsero tenga tanto movimiento. Estamos muy solicitados en el país e internacionalmente”.
Haber ganado el Casandra ha sido una bendición para el salsero, quien entiende que esto lo impulsa y lo compromete a “demostrar que merecemos ese premio y los demás que puedan llegar”.
Segundo álbum. El poco tiempo que tiene libre, el cantante lo invierte en la grabación de su nueva producción “La salsa vive”, cuyo nombre surgió a raíz de una campaña que inició Chino Méndez para que este género fuera incluido otra vez en el Casandra.
El disco, que saldrá a mediados de año, incluye “Si entendieras”, “Una noche no es bastante”, “El cariño es como una flor”. Además Alex ha hecho su propio aporte con los temas “Qué pena me da”, “Amor por internet” a dúo con Vakeró, y “Debo decirte que te amo”. Ha recibido la colaboración de Roy Tabaré y Willy García, de Son de Cali.
Alex aceptó el reto y confía en el éxito de su disco... es un hombre de fe.
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La gira
Estados Unidos
El martes pasado, Alex Matos inició una gira que lo llevará durante un mes por varias ciudades de Estados Unidos: Filadelfia, Washington, Los Ángeles, Pensilvania y Houston son algunos de los lugares a los que llevará su salsa. “Vamos en camino a la internacionalización porque uno logra esta meta cuando la mayor cantidad de personas que te visita no es de tu país”, señaló el joven.
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